Prácticos, cómodos y versátiles. Los jeans Levi’s son una prenda de vestir usada a diario por la sociedad: desde vaqueros en el lejano oeste hasta hippies, estrellas de Hollywood, sufragistas y leyendas del rock & roll. Pero, ¿cuál es la historia detrás de esta aclamada prenda de vestir? Aquí todos los detalles.
Conociendo a Levi Strauss
En 1847, Levi Strauss – un hombre nacido en Baviera, Alemania – llegó a New York, Estados Unidos, junto a sus dos hermanos y su madre. La motivación de otros familiares que habían emigrado al país los llevó a cruzar las aguas.
Para 1853 se trasladó a San Francisco, lugar en el que decidió abrir una pequeña tienda de mercería. Con ingenio y esfuerzo, este judío se convirtió en el empresario fundador de Levi Strauss & Co: uno de los mayores fabricantes de prendas de vestir en el mundo.
La fiebre del oro
Su llegada a San Francisco estuvo marcada por la fiebre del oro de los años 50. En ese momento, los mineros necesitaban pantalones resistentes y a Levi Strauss se le ocurrió una idea: contrató a un sastre para realizar prendas con la tela de las tiendas de campaña.
Nacimiento de los vaqueros azules
En 1872, Jacob Davis, sastre judío que le compraba de manera regular de Levi’s, le comunicó que los pantalones tenían un defecto: los bolsillos se descosían fácilmente con el duro trabajo de la mina.
La solución fue sencilla y juntos la encontraron: reforzar las esquinas de los bolsillos con remaches. Así, deciden solicitar la patente del proceso y para el 20 de mayo de 1873 obtuvieron la concesión americana y la marca fue registrada en Estados Unidos.
De esta manera, nace de forma oficial el primer pantalón remachado de Levi´s e inicia la producción de la prenda de vestir más fabricada de todos los tiempos: el jean.
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Una identificación con carácter
La compañía necesitaría 13 años para conceptualizar el logo que acompaña a los pantalones Levi’s hasta nuestros días.
Los dos caballos que tiran del pantalón que forman el logo de la marca fue creado en 1886. Este diseño simboliza la fuerza del tejido y amedrenta a aquellos que quieren hacerle competencia.
El boom durante la guerra
La Gran Guerra obliga a los hombres a ir al frente y a las mujeres a quedarse a cargo del trabajo manual. Por ello, la ropa cómoda se volvió indispensable para la sociedad y Levi’s respondió al llamado.
La marca decidió lanzar unos petos de una pieza llamados Freedom-Alls. La receptividad fue tal que pronto se convirtió en el símbolo del nuevo papel de la mujer en la sociedad.
Escuchando a las mujeres
Una vez finalizada la guerra – y sin saber que una nueva acechaba el horizonte -, Levi’s aprovecha el nuevo público conseguido y lanza su primera colección femenina de jeans en 1934: Lady Lavi’s.
Fue una invención que rompió barreras al vestir, pero que para ser socialmente aceptada tuvo que pasar dos décadas. Tracey Panek, historiador de Levi’s&Co, explica: “Era considerado inapropiado e inaceptable en la década de 1930 y 1940, con pocas excepciones».
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Medidas extremas
La Segunda Guerra Mundial trajo consigo una crisis económica sin precedentes. Con ella, todas las industrias debían ahorrar en materiales – el metal, el tejido y el hijo eran algunos de los que se usaban en el frente.
Así, la compañía se vio afectada y tuvo que reducir sus vaqueros clásicos a lo más esencial. Optaron por despedirse de los ribeteados, los dobladillos y los bolsillos traseros, que comenzaron a pintar en lugar de coser – como ya se hacía con las medias.
Respondiendo a las necesidades
El final de la Segunda Guerra Mundial marca el inicio de la “locura del vaquero azul” en Estados Unidos y comienza a ser adoptada por la cultura hippie del momento.
Para 1970 se da la revolución de los más jóvenes con la anda rockera y punk. Ante las necesidades de la sociedad, Levi’s se reinventa y responde con tiros bajos, diseños más ajustados y repletos de rotos y descosidos.
Un mercado difícil
Al percibir la receptividad del pantalón, la competencia no tarda en fabricar jeans y ofrecerlos a un precio más asequible. Este mercado globalizado lleva a la marca a cerrar casi todas sus fabricad en Estados Unidos.
Aunque le costó conseguir el equilibrio entre su herencia historia y las necesidades del público actual, los vaqueros Levi’s siguen siendo sinónimo de calidad y han apostado por la sostenibilidad en la industria textil – aspecto que han mantenido en el tiempo.