Seguramente, uno de tus propósitos para este 2021 ha sido bajar unos kilitos de más, esos que ganamos en Navidad. Y una de las estrategias que está dando de qué hablar es el ayuno intermitente, una de las dietas más conocidas y que, a pesar de su popularidad, se han creado mitos y rumores en su entorno. Por eso, aquí te traemos algunos tips sobre ello.
El Ayuno Intermitente, ¿un protocolo para ti?
El Ayuno Intermitente ha entrado, poco a poco, en la vida de cientos de personas en el mundo, por el concepto que presenta y los resultados efectivos. Sin embargo, estamos hablando de un protocolo de alimentación que, para algunos, le ha resultado toda una aventura, pues se trata de una verdadera estrategia nutricional.
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Pero, como mencionamos anteriormente, aún existen algunas dudas sobre este tema, mismas que, a continuación, te despejaremos.
¿A qué nos referimos con ayuno intermitente?
Se trata de una tarea totalmente sencilla, la cual se basa en ayunar durante las horas que tú desees, y tener otro ciclo horario donde puedes comer. Pero, la idea no es que se inicie de forma descontrolado, pues eso no significa que se obtendrán beneficios instantáneos.
Pues recordemos que nuestro cuerpo es un templo, que cuenta con un horario establecido de comida, y al provocarle un cambio radical éste se verá afectado. De igual forma, se recomienda que esas horas en las que no se consume comida, se pueden ingerir bebidas como té o café.
¿Cómo puedo iniciar mi ayuno intermitente?
Lo primordial, es acostumbrar al cuerpo a ese cambio que le vas a incorporar, por lo que se recomienda empezar por atrasar el desayuno y adelantar la cena una o dos horas. Luego que esto lo podamos hacer fácil, podremos ir avanzando progresivamente hasta llegar a la meta deseada.
En todo este tema hay una clave esencial: no se trata de adaptar nuestras vidas al ayuno intermitente, sino de adaptar el ayuno a nuestras vidas. En este sentido, el protocolo no interferirá con nuestra rutina diaria.
También es importante tener en cuenta, que el ayuno intermitente no nos hará perder peso de forma milagrosa, o que vaya a mejorar nuestra salud en un solo día. Pues estamos hablando de un proceso de largo plazo. Es así, como nos encontramos con un estilo de vida que, según se aconseja, debería estar acompañado de otros hábitos saludables.
¿Cuál es el tipo de ayuno para mí?
Por supuesto, como todo protocolo cuenta con distintos tipos que van desde el más sencillo de 12/12, el más conocido de 16/8- en el que se pretende tener 16 horas de ayuno y consumir toda la ingesta calórica necesaria en 8 horas-; hasta el exigente 24/0.
El ayuno muestra beneficios en cada uno de sus tipos y, lo más importante, es encontrar ese que se adapte mejor a nosotros, no el que sea más radical. Por ello, se debe planificar en función a la hora en que se suele comer, las actividades que tenemos en la semana y en qué horarios las realizamos.
Por ello, tener un plan es de gran importancia pues se trata de un protocolo de alimentación beneficioso a largo plazo. Y junto a un ayuno que te resulte fácil de seguir existen más posibilidades de que puedas seguir avanzando si así lo deseas.
¿Qué se puede comer durante el ayuno intermitente?
Es importante acabar con el mito de que el ayuno intermitente estable qué se puede comer y qué no, pero si consumimos más calorías de las que quemamos, por mucho que sea en menos horas, no perderemos peso.
Asimismo, el consumo habitual de alimentos ultraprocesados, azúcares añadidos y grasas trans están relacionados con problemas de salud aunque hagamos ayuno. Es por ello, que cuidar los valores nutricionales de lo que consumimos es realmente importante, incluso si el objetivo no es perder peso, sino cuidarnos.
Teniendo esto en mente, se aconseja es que las calorías consumidas provengan, en su mayoría, de alimentos frescos, verduras, vegetales, frutas, pescados, carnes magras, legumbres y frutos secos.
Beneficios del ayuno intermitente
De acuerdo a las investigaciones, se ha detectado que este protocolo no solo puede ayudarnos a perder peso, sino también a reducir factores de riesgo de algunas enfermedades. Entre ellas: el síndrome metabólico o enfermedades cardiovasculares.
Una de las principales ventajas, con respecto al peso y su control, es que ayuda a mejorar la sensibilidad que tenemos a la insulina, además de mejorar el uso que nuestro cuerpo hace de la glucosa.
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Ahora, que conoces todo lo que referente a este protocolo, puedes considerar entrar en este nuevo estilo de vida que está marcando tendencia para la salud.