Plácido Domingo cumplió con las expectativas de todas las personas que asistieron esa noche, para disfrutar de su voz y escena. Interpretó zarzuelas y temas de Venezuela, junto con la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar y la soprano de Uruguay, María José Sirit, en el Poliedro de Caracas
Elegancia, arte y un talento indiscutible se llevaron el protagonismo de este espectáculo. Plácido Domingo estuvo más de dos horas en escena, con un intermedio, lo que alternaba con la soprano, María José Sirit y la Sinfónica, bajo la batuta de Kamal Khan, quienes compartieron emotivas interpretaciones, bajo la cúpula del Poliedro.
Los aplausos del público fueron constantes, al finalizar cada uno de los temas de su repertorio. Hubo momentos llenos de emoción, como recordar su encuentro con el maestro José Antonio Abreu y Simón Díaz, dos grandes de la música y con los que compartió, en otras visitas al país, que hizo el tenor.
La morena de mi copla, En mi tierra extremeña, No puede ser, la infaltable letra de El Alma Llanera, Caballo Viejo, Bésame mucho, entre otras, como Granada, con la que finalizó el concierto, con una atmósfera cargada de agradecimiento, alegría y con la mejor melodía.