A lo largo de la historia de Venezuela han resaltado innumerables artistas por sus icónicos trabajos en el mundo del arte. Juan Lovera, conocido por todos como el ‘Pintor de los Próceres’, no escapa de esta realidad, ya que con su pincel ha dado vida a cuadros emblemáticos que han marcado la historia del país. Aquí todos los detalles del artista venezolano de los próceres.
Conociendo sus inicios
Juana Rosalba Arriechedera dio a luz a Juan Lovera el 26 de diciembre de 1778 en Caracas. Juana y Atanasio Lovera, dos pardos libres, criaron a Lovera. Su pasión por el arte comenzó a demostrarse desde muy temprana edad.
Comenzó como pintor artesanal y luego en el Convento de los Dominicos – llamado San Jacinto – estudió pintura de la mano de los frailes. Más adelante, Antonio José Landaeta pasaría a ser su maestro en la pintura colonial.
A los 21 años contaba con un taller en Caracas para trabajar. A este lugar lo visitaron ilustres personajes, Alejandro de Humboldt y Aimeé Bonpland son algunos de los más destacables. La pintura de retrato marcó sus obras en esta primera década del siglo XIX.
Aunque también fungió como pintor-decorador de iglesias. Su trabajo en la parroquia del pueblo de La Victoria, en el estado Aragua, es una muestra de la calidad de lo que podía llegar a pintar el artista venezolano de los próceres.
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Huyendo para sobrevivir
Al formar parte de los grupos patriotas, en 1814 tuvo que huir de Caracas hacia el oriente del país – radicándose por un tiempo en Cumaná -, puesto que la caída de la ciudad era inminente y el fin de la Primera República de Venezuela a manos del ejercito realista.
Aunque tuvo que dejar por un tiempo la producción de pinturas, para 1820 retomó su pasión y trabajó en el cuadro de La Divina Pastora, una de sus mejores obras religiosas.
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Pinturas que marcaron la historia
El artista venezolano de los próceres realizó dos lienzos espectaculares que retratan hechos icónicos de la historia de Venezuela. Uno es ‘El 19 de abril de 1810’, pintado en 1835, y el otro es ‘El 5 de julio de 1811’, pintado en 1836.
¿Cómo tuvo la capacidad de retratar estos momentos? Lovera, al llegar el levantamiento independentista, se reveló como patriota y fue testigo de los acontecimientos que llevaron a la firma de la independencia de Venezuela del poder colonial español.
En estas pinturas vemos como el ‘Pintor de los Próceres’ convierte al pueblo venezolano en el protagonista de la escena con brillantez y siguiendo la tradición artística colonial.
Parecidas, pero no iguales
La Firma del Acta de la Independencia – hecho histórico celebrado el 5 de julio de 1811 – no fue plasmado únicamente por Juan Lovera en el siglo XIX, puesto que el artista Martín Tovar y Tovar también tomó la iniciativa.
En estos momentos, la pintura original del artista venezolano de los próceres se encuentra en el Concejo Municipal de Distrito Capital. Por su parte, el resultado de Tovar y Tovar está en el Salón Elíptico del Palacio Federal Legislativo, lugar en el que acompaña al Acta original.