A través del tiempo, el arte se ha convertido en un vehículo de expresión para los individuos sobre la faz de la tierra. Un medio con el que las distintas figuras han podido reflejar sus ideas, sentimientos y emociones. Su pasión ha trascendido a tal punto que, algunos artistas, han creado una conexión proveniente desde el corazón. Justo como el lazo especial que ha establecido el talentoso venezolano Carlos Vallenilla a través de sus “Latidos”.
El arte a través de los latidos del corazón
Sin duda alguna, el arte contemporáneo es una de las tendencias que dominan la cultura pop en la actualidad. Una corriente que le ha dado la posibilidad a cientos de ingeniosos artistas de dar forma a una nueva fuente de expresión, a una vitrina en donde la creatividad y la autenticidad están a flor de piel.
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Uno de ellos ha sido el venezolano Carlos Vallenilla, un artista plástico que se ha destacado por realizar obras que combinan colores vibrantes, volumen, formas y con una composición que rompe con los arquetipos tradicionales. Y es que, en definitiva, sus obras llevan una estampa imborrable que, por supuesto, no logran pasar desapercibidas.
Para el barquisimetano la pandemia no pudo llegar en un mejor momento, pues fue la ocasión indicada para dar rienda suelta a su imaginación y, de esta forma, iniciar con un nuevo capítulo en su vida.
Carlos Vallenilla en busca de su «verdadero yo»
Fue así, como Carlos fue desarrollando ideas, creando nexos en su imaginación, dándole pinceladas a cada pensamiento que pasaba por su mente. Un largo proceso que lo llevó a encontrarse con su “verdadero yo”, sin ningún tipo de ataduras o disfraz.
De esta forma, Vallenilla se percató que cada experiencia vivida, cada momento gozado y todo lo que hemos enfrentado ha conseguido afectarnos de cierta forma. Sentimientos y acciones que, a su juicio, provienen del corazón. Fue la premisa que utilizó para titular su nuevo proyecto “Latidos”, una serie de corazones intervenidos, que van desde esculturas para colocarse en pared o en cuadros para crear un espacio vistoso y único.
A lo largo de la colección, nos encontramos con una serie de piezas, una muy distinta a la otra, que reflejan muchas personalidades y sentimientos. Esto con la idea de ejemplificar una situación que movió de una forma única a cada persona.
En este sentido, el artista venezolano buscó crear conceptos y, al mismo tiempo, apoyarse en sus propias experiencias para darle vida a esta formas de amor con latidos de arte.
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Lo mejor de todo, es que para la creación de estas piezas, Carlos utilizó una variedad de materiales, como el papeles reciclados, periódicos, pinturas y diferentes texturas.
Es así, como Latidos es la concepción de una visión clara y concisa: cada corazón es único que, de entre las cenizas, puede renacer y encontrar esa alegría que tanto anhela y alberga en lo más profundo de su ser.
Si deseas conocer más sobre esta propuesta, tener acceso a sus obras de arte y demás; te invitamos a conectarte con Carlos Vallenilla a través de sus redes sociales.
