Un recorrido de sabores, aromas y texturas se ven conjugados en una propuesta que enaltece el sentir y el pensar del tricolor nacional. A través de una experiencia sensorial que nos transporta a las figuras más emblemáticas de nuestra tierra, ATRIO abre sus puertas a un universo en donde la venezolanidad es la protagonista de sus sutiles platillos.
Atrio: cocina que rescata los sabores venezolanos
Bajo la premisa de una cocina moderna local, ATRIO es la nueva propuesta gastronómica que se abre paso en el mercado venezolano. Gracias a su concepto que busca exaltar las maravillas criollas, este restaurant de lujo pretende causar sensación en el público caraqueño.
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El espacio, ubicado en la calle 2 de Mayo con Calle Sucre, Municipio el Hatillo; fue concebido por un grupo gastronómico liderado por el gerente Armando Sánchez que, junto a su esposa Olga Palau; desea rescatar esos sabores trasformados en experiencias, los cuales son la herramienta perfecta para un viaje cultural.
En este sentido, nos referimos a un lugar que ofrece una vivencia de 360 grados, la cual inicia desde que entras a su cálido seno, hasta que abandonas el sitio con regocijo.
Buena música, una decoración minimalista pero bien pensada, un servicio personalizado, platillos que fueron elaborados de forma minuciosa y un placentero viaje de sabor; son algunas de las bondades que hacen de ATRIO toda una estrella naciente.
Según explicó Sánchez, esta propuesta es el segundo paso de su concepción de una línea que pretende resaltar el bagaje cultural venezolano, pero de otro nivel.
“Usando la metáfora de los espacios de las viviendas coloniales, con ATRIO, los invitamos a pasar al siguiente nivel de nuestra casa”, destacó.
Pero, este resultado se debe, en gran parte, a las influencias y técnicas del Chef José Antonio Casanova, la mente maestra detrás de la preparación y detalle de cada platillo. Así como de quien se ha encargado de hacer realidad la idea de Sánchez, gracias a la asesoría de Mónica Sahmkow.
Platillos bien pensados y que honran el tricolor nacional
En cada una de sus obras, pues son verdaderas creaciones de arte; vemos la representación de una figura, estilo o lugar emblemático que nos recuerda el verdadero orgullo venezolano. El comensal podrá apreciar algunas alegorías de piezas, tales como: El Coloritmo 63 de Alejandro Otero, o la obra de la poeta y dramaturga venezolana Yolanda Pantín.
Desde que el comensal se sienta en su mesa podrá abordar un tren hacia la modernidad, un viaje hacia un sentido homenaje que, a través de la comida, resaltan la esencia del venezolano. Con una variada propuesta en la que se percibe siente la esencia de nuestra tierra.
¿Qué platillos podremos ver y cómo se conceptualizó el tributo hacia estos personajes? Pues, principalmente, gracias a las técnicas y experiencia del Chef José Antonio Casanova, se logró dar forma a una variedad de platillos, cada uno concebido de forma detenida y con precisión.
Cada platillo cuenta con una historia de trasfondo, que no solo es profesada mediante la explicación del mesero encargado; sino con una escena que se aviva con la experiencia de estas preparaciones.
Con tan solo un vistazo, nos damos cuenta que es una escenificación perfecta a la cultura venezolana, un hecho que se logra gracias a la impresión 3D.
El bagaje cultural dice presente en ATRIO
De esta manera, nos encontramos, primordialmente, con un menú de 7 tiempos conformado por:
- Gargouillou de Timotes: es un delicado platillo en el que se dispone, de forma espléndida, una serie de verduras que hacen honor a la laguna azul y a los vegetales cultivados en nuestra tierra. Remolacha blanca encurtida, apio confitado, mayonesa de kimchi, cilindro de garbanzos y quínoa roja. Se unen al puré de coliflor, flores de mostaza sobre caldo azul de sacha inchi y malagueta.
- Steak Tartare de Avestruz: un platillo principal conformado por carne de avestruz cortada a mano marinada en aceite a paprika ahumada, cebolla morada y mayonesa de ostras frescas. Además, de un crujiente de yuka, merey, mañoco y cenizas de plátano sobre yaraque texturizado. Una comida que hace honor a los yekuanas.
- Vuelve a la vida 63: langostinos cocidos en dashi, emulsión de vuelve a la vida, puré de colinabo, manjar salado de coco, gel de orégano orejón, ají dulce y cebolla caramelizada. Todo ello da vida a un tributo al Coloritmo 63 del artista Alejandro otero.
- Monocromático de mero aleta amarilla: una verdadera representación de los mares venezolanos en donde el corte de mero en beurre monté se exalta con buenos acompañantes. Junto a milhojas de ocumo confitado, topocho en mantequilla de nam pla, buñuelo de yuca, esferas de mapuey, cebolla blanca encurtida y emulsión de las espinas del mero y sofrito; dan vida a este magnífico platillo.
Cremoso de dulce de paleta 
Gargouillou de Timotes 
Vuelve a la vida 63
- Mar y montaña: haciendo un homenaje al poema Land’s end de la dramaturga Yolanda Pantin; en ATRIO podrás encontrar este platillo compuesto por un corte de conejo en dos tiempos. Acompañado de alcachofas confitadas, emulsión de culantro, cola de langosta marinada en onoto, zanahoria y celery en vinagre, aire cítrico, escabeche de rosas y Suquet.
- Parfait de leche y frutos rojos: una capa de crujiente láctea y flor de sauco, ciruela criolla, pâte de fruit cítrico de guayaba y mango sobre aceite de mastranto. Un conjunto da a este tributo del tema “El becerrito” del maestro Simón Díaz.
- Cremoso de dulce de paleta: para cerrar este menú de degustación, el chef nos presenta este postre que lleva su sello personal. Conformado por una granita de cocuy de pecaya, praliné de merey merengue seco de naranja quemada. Ingredientes que fueron dispuestos para darle forma a una obra maestra que le rinde homenaje a la Lunita de Cabudare de Juan Vicente Torrealba.
Un restaurante con sentido y visiòn
“Han sido meses de trabajo para lograr como resultado una comida de alta gama para ser deleitada por todos nuestros sentidos… el concepto está diseñado para sorprender y destacar más cosas buenas de Venezuela”, comentó Sánchez.
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Steak Tartare de Avestruz 
Pan tipo italiano, danés e hindú con untuoso de mantequilla 
Pan tipo danés con especias locales
Por su lado, Olga Palau resaltó el hecho de que, a pesar que en Venezuela existan buenas propuestas, no había ninguna que lograra abarcar cada uno de los elementos para un verdadero restaurante que mereciera una estrella Michelín, pues ese es su objetivo.
¡Abrió sus puertas! A partir de hoy, el público venezolano podrá vivir la experiencia de ATRIO, una cocina moderna local que rinde tributo a la cultura venezolana mediante sus sabores. El sitio idóneo para pasar un momento especial junto a tus seres queridos.
Si deseas conocer más sobre esta propuesta, te invitamos a que sigas las redes sociales de ATRIO restaurante para que, de esta forma, seas parte de una verdadera experiencia sensorial.
