Cada año Halloween se hace más popular en los países que por costumbre no celebran esta festividad. Sin embargo, el carácter lúdico de la misma y lo mucho que entretiene a grandes y chicos ha hecho que sea una celebración para toda la familia. A continuación te contamos cinco curiosidades de esta celebración.
¿Cuál es su origen?
Se remonta a una festividad céltica conocida como “Samhain” y que significa «fin del verano». En esa fecha, los antiguos celtas celebraban el final de la temporada de cosechas y el inicio del “nuevo año”. El año céltico concluía el 31 de octubre, dividiendo la época de luz (primavera y verano) y otra de oscuridad (otoño e invierno). Según sus creencias, la noche del cambio de año era el momento en el que las fronteras entre este y el Otro Mundo se difuminaban y los espíritus de los difuntos podían caminar entre los vivos.
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¿Por qué los disfraces?
También viene de los celtas. Ellos creían que los seres de ese otro mundo vagaban por la tierra ese día y se disfrazaban para pasar desapercibidos. También dejaban dulces en la puerta de los hogares para mantenerlos a raya y apaciguarlos.
Tallar vegetales
La tradición de tallar calabazas viene de una leyenda también irlandesa. Cuentan que un hombre llamado Stingy Jack se fue a emborrachar con el diablo y lo trató de convencer que se convirtiera en una moneda para pagar las bebidas. Tras conseguirlo se guardo al diablo en forma de moneda en el bolsillo, prometió liberarlo siempre y cuando le asegurara que no al morir no podía llevarse su alma. Cuando Jack murió Dios decidió que no podía ir al cielo y el diablo no podía llevarlo al infierno. Por eso tuvo que vagar por la tierra con un carbón encendido que servía para alumbrar. Jack puso el carbón dentro de un nabo a modo de farol. Basándose en este historia, los irlandeses empezaron a tallar caras espeluznantes en babos, remolachas y papas para ahuyentar a Jack y al resto de los malos espíritus.
En el mundo
En Alemania la noche de Halloween se guardan los cuchillos para no hacerle daño a los espíritus que regresan al mundo de los vivos. Mientras que en Austria, las personas antes de ir a la cama dejan pan, agua y una lámpara encendida para recibir a los difuntos. En Madagascar, aunque el Halloween no se celebra como tal, tienen la costumbre el 31 de octubre de abrir las tumbas de los muertos para cambiarles la ropa.
Negro y anaranjado
¿Alguna vez te has preguntado por qué el negro y anaranjado son los colores de esta festividad? Esto se debe a que el primer color representa la oscuridad de la noche y el límite entre la vida y la muerte, mientras que el anaranjado simboliza la caída del otoño según los celtas.