Diamonds are a girl’s best friends, dijo Marilyn Monroe una vez y es la verdad, pero siempre y cuando sean auténticos y de calidad. Hablamos con 18JOK para conocer cuáles son las características fundamentales para estudiar los diamantes y nos explicaron que varían según 4 variantes ¿Cuáles son? ¿Cómo determinamos su valor? Aquí te contamos todo.
¿Cómo estudiar los diamantes?
Entender de gemas es un trabajo complejo, es por eso que al momento de hacer una inversión es importante contar con gemólogos especializados. Para poder estudiar las gemas, se toman en cuenta 4 factores fundamentales que fueron ideados por el Gemological Institute of America (GIA), que es una institución que se dedica a la investigación de la gemología.
En 1953, la GIA publicó su estudio del “Sistema internacional de calificación de diamantes” que se rige por 4 vertientes: Cut, Clarity, Color, Carat Weight. Su misión era establecer un sistema único y claro que determinara el valor de los diamantes. Hoy es el sistema más utilizado del mundo.
Los Carats del diamante:
En español se les conoce como “quilates” y son la medida de peso que se utiliza para los diamantes. Es importante que entendamos, que la cantidad de quilates de una pieza no determina su valor por sí misma. Los gemólogos de 18JOK nos recuerdan, que para poder entender cuál es el valor de un diamante, es importante estudiar todas las características anteriores.
¿Para qué funcionan los quilates? Para entender cuál es el peso. Un quilate es equivalente 0.20 gramos. El peso está determinado por la profundidad del corte y no tiene incidencia en su apariencia. Un diamante ligero puede verse más grande que uno pesado, dependiendo de cómo está cortado.
¿Mientras más quilates, mejor? El peso no determina su valor porque depende en gran parte de la forma en la que está cortado el diamante. Si el corte es chato y profundo probablemente sea más pesado y pequeño, mientras que uno alargado puede pesar menos y verse más grande.
Para que los quilates de un diamante tengan valor, es importante que esté cortado de forma inteligente para que la luz caiga sobre él a la perfección. Para esto, es imperativo contar con expertos gemólogos que puedan trabajar persiguiendo exaltar la belleza de una gema en lugar de preocuparse por su tamaño.
El corte del diamante:
Es la única característica en la que interviene la mano del hombre, define su forma, utilidad y la manera en la que la luz reacciona sobre la gema. ¿Cómo sabemos que un corte es el adecuado?
-Debe ser preciso: las líneas del corte deben estar perfectamente ejecutadas para que sus dimensiones y ángulos trabajen a favor de la luz. La idea es que la luz pueda entrar y salir del diamante sin quebrarse.
-Debe ser simétrico: el diamante debe ser exactamente igual por todos los lados, cada faceta de la gema debe estar perfectamente alineada. Esto demuestra su calidad, garantiza su sostenibilidad en el tiempo y también, lo hace útil al momento de ensamblarlo en una joya.
-Debe estar muy bien pulido: el corte es fundamental para que la luz viaje a través del diamante, pero la pulitura es vital para que luzca brillante. Además, hace que los cortes luzcan perfectos, sin líneas rústicas.
¿Por qué el corte es tan importante? Es la característica principal del diamante. Si no está bien cortado, la luz quedará atrapada dentro de la gema y se verá opaco y sin vida. Un buen corte hará que el diamante sea un refractor de luz, atrapándola y expandiéndola, viéndose mucho más brillante y hermoso.
El color del diamante:
Cuando hablamos de color, es la tinta natural que tiene cada gema proveniente de la tierra. La gran mayoría de los diamantes naturales, cuenta con un tono amarillento en su naturaleza. Según los gemólogos de 18Jok, mientras más transparente sea una gema, más valiosa, rara y costosa es.
En el caso del color, mientras más ausente esté, muchísimo mejor. Para poder determinar qué tan transparente es una gema, se le mide con un sistema de letras. Aquí tienes la explicación:
DEF: Son los diamantes más valiosos, porque son completamente transparentes. No tienen coloración.
GHIJ: Su composición es casi completamente transparente, siguen siendo valiosos y extraños.
KLM: Dentro de su coloración, se encuentran trazas de amarillo que evitan que la gema sea completamente traslúcida. Para los ojos desnudos, la pieza es transparente.
NOPQR: Su color es de un color amarillo pálido, pero es bastante ligero. Se observa a simple vista.
STUVWXYZ: La gema es de color amarillo pálido de forma natural. Su coloración es visible con ojos desnudos y lupa.
Lo más deseado en un diamante, es que no tenga color, de esta forma, la luz se reflejará hermosamente en toda la pieza, nos explica 18JOK.
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La claridad del diamante:
Es la medida que se utiliza para determinar qué tan puro es un diamante o qué tan única es una gema. ¿Cómo se mide? No se utiliza con el ojo desnudo, es importante la mirada de un experto para determinarla porque se mide con un grado de magnificación de 10x bajo la lupa.
Al momento de estudiar una gema, 18Jok nos explica que es importante ver que no tenga imperfecciones. Si bien algunas no son visibles al ojo común, las imperfecciones dentro del diamante hacen que la luz quede atrapada y que la gema luzca opaca y sin vida.
Las clasificaciones varían según los grados de transparencia de la gema. Mientras más traslúcido y transparente sea, mayor es la calidad (y el valor). Aquí tienes una guía para saber cuáles son los tipos de diamantes:
FL (Flawless): Son los diamantes perfectos por fuera y por dentro, sin ningún tipo de imperfección. Difíciles de conseguir, costosos y extraordinarios.
IF (Internal Flawless): Son diamantes que, por dentro, son traslúcidos y perfectos, por lo que reflejan la luz sin inconvenientes.
Tipos VS1, VS2, VVS1 y VVS2 (Very Very Slightly Included, Very Slightly Included): Tienen pequeñas imperfecciones en su interior, pero siguen reflejando la luz sin mayores inconvenientes. Al ojo desnudo, lucen perfectos. Son menos costosos y se siguen viendo hermosos.
SI1 y SI2 (Slightly Included): tienen en su interior imperfecciones, pero siguen siendo buenos para utilizarlos en joyería, porque sus baches no están ubicados en partes centrales de la pieza.
I1, I2, I3 (Included): son los diamantes imperfectos, los que tienen baches ubicados a lo largo y ancho de la prenda que comprometen la refracción de la luz.
En 18Jok, además de hacer estudios personalizados de tus joyas (tomando en cuenta las 4 características fundamentales), pueden transformarlas según sean tus elecciones. Trabajan bajo pedidos personalizados en donde contarás con la opinión de gemólogos profesionales que buscarán que cada una de tus joyas se mantenga valiosa. Si quieres más información, síguelos en sus redes sociales haciendo click aquí o en su nueva página web.