En la historia de «La leyenda de Ochi», están Willem Dafoe y Emily Watson, dirigidos por Isaiah Saxon, en su primer largometraje, y con la aclamación de la crítica internacional. Aventura, fantasía y un toque de comedia, son los géneros de este conmovedor relato
“La leyenda de Ochi”, ópera prima de Isaiah Saxon, narra la vida de Yuri (la joven actriz alemana Helena Zengel), quien crece con pánico a ciertos seres solitarios del bosque, en la exuberante y montañosa isla ficticia de Carpatia, que tiene un natural clima “misterioso” dada su abundante neblina. Esas criaturas son, justamente, los Ochi, consideradas peligrosas para todos los humanos. Pero Yuri cambia su perspectiva, cuando se topa con un Ochi bebé en pleno bosque, y decide ayudarlo a reencontrarse con su familia, especialmente con su mamá.
Uno de los conflictos principales de la protagonista, es que su padre, Maxim (Willem Dafoe), es el líder de cacería de los Ochis en el bosque, por considerarlas especies siniestras y por su perturbador tono agudo. Emily Watson es Yasha, la madre de Yuri, que el padre procura no mencionar, desde que esta los abandonó. Con este contexto se desarrolla una aventura llena de mucha acción, comedia y también mucha ternura, por ese ser que genera un vínculo afectivo con la heroína de turno y con la audiencia.
La magia de la creación de Ochi
El personaje de Ochi, no es generado por un efecto computarizado, es un títere manejado por un equipo de titiriteros, que incluso tomó un taller de interpretación de marionetas en el Reino Unido, para llevar a cabo el rodaje. Esto en equipo con el diseñador de producción, Jason Kisvarday y el director de fotografía, Evan Prosofsky, según el director Isaiah Saxon.
El rodaje fue en los bosques de Rumanía, en una zona que, antes de la filmación, fue devastada por los osos, quienes según lo que indican las notas de producción en el sitio Imdb.com, destrozaron varias cabañas. En el perfil de Isaiah Saxon, puede verse un tras cámaras de esta producción, en el que todo el equipo trabajó, aparentemente, en armonía con la naturaleza y procurando que el títere, que le da el nombre a la historia, tuviese los planos correctos.
La crítica internacional ha aplaudido el resultado de “La leyenda de Ochi”, por su cinematografía, con una dirección de fotografía que aprovechó el paisaje natural rumano, por su originalidad y su relato cautivador. Mundo D Película trae esta cinta a la cartelera venezolana.