Tamara Falcó, la Marquesa de Griñón, está a con los últimos detalles para el gran día. Viajó a Nueva York, este fin de semana, para reunirse con la destacada diseñadora venezolana, con el fin de coordinar cómo quería su vestido y así concentrarse en otros detalles de su boda
La socialité tomó un vuelo de Madrid a Nueva York, este pasado domingo 21 de mayo, para su cita con Carolina Herrera, quien se encargará de su majestuoso vestido de novia. Tenía muchas propuestas, pero prefirió aceptar a una de sus firmas de confianza.
Tamara Falcó en principio, para su enlace matrimonial, tendría un diseño confeccionado por Sophie et Voilà, relación que terminó por diferencias sobre el vestido, al parecer fueron muchas exigencias por parte de la futura esposa de Íñigo Onieva.
La Marquesa de Griñón no solo contará con la reconocida venezolana, Carolina Herrera, también con Wes Gordon, asesor creativo de la diseñadora, él estará en la primera prueba del vestido.
Tras regresar del viaje relámpago a Nueva York, donde ha estado algo más de 48 horas, Tamara Falcó ha retomado su agenda, ahora con destino a Ibiza. Allí cumple con compromiso profesional de Porcelanosa, una de sus marcas. Con su atuendo de chef, ha preparado una elaboración gastronómica para los invitados de ese evento.
El matrimonio de Tamara e Íñigo será el próximo 8 de julio, en un lugar muy especial para ella: El Rincón, la fortaleza del siglo XIX que heredó de su padre, el fallecido marqués de Griñón, Carlos Falcó.