Con una visión extremadamente poética de la vida, Luchita Hurtado transformó el mundo a su alrededor en un ‘planeta vivo’. Sus motivos feministas y ecologistas, hacen de su arte un reclamo político sutil y a la vez, poderoso. De personalidad calmada y misteriosa, es una de las artistas más increíbles de nuestra historia.
¿Quién es Luchita Hurtado?
Nacida en Maiquetía, Venezuela, Luchita Hurtado es una artista de producción masiva, que se dedicó su creación al surrealismo. Su historia estuvo llena de altibajos y cambios dramáticos constantes. El arte se transformó en su refugio y sustento, por décadas y décadas, hasta que en un momento, logró salir a la luz y encontró reconocimiento internacional.
Hurtado emigró a Estados Unidos cuando tenía 8 años, de la mano de su madre y su padrastro. Sus inicios no fueron sencillos, además de ser inmigrante, parecía tener intereses muy diferentes a los de su familia: “Mi madre y mi padrastro realmente no estaban interesados en lo que estaba haciendo, o en lo que me gustaba hacer. (…) Aprendí de mis contemporáneos, porque mi familia estaba completamente fuera de mi mundo”, comentó.
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Caminó a través del arte gracias a colegas y amigos que hizo estudiando. Se casó muy joven y eso fue una prueba durísima para su destino:
“Me casé cuando tenía 19 años, recién salida de la escuela secundaria. Y me casé con un hombre, desafortunadamente, que, poco después de tener dos hijos, vino a buscar sus libros y se fue, y nunca lo volví a ver. Simplemente desapareció. Y se volvió a casar”, en ese momento, debió buscar sustento para sus hijos y comenzó a pintar murales para tiendas de moda.
¿Cómo es el arte de Luchita?
Luchita Hurtado pasó más de 80 años completamente inadvertida en el mundo del arte. Pese a que fue amiga de grandes artistas como Frida Kahlo, Roberto Matta, Leonora Carrington, entre otras figuras que la influenciaron en su forma de ver el mundo.
Su trabajo artístico se puede traducir como las meditaciones de una mujer en búsqueda de calma. La mayor parte de sus motivos son autorretratos de su propio cuerpo, porque solo podía darse el lujo de pintar en sus tiempos libres y no tenía acceso a demasiados tópicos y modelos.
El amor por la ecología y el planeta, segmentaron su producción artística a un punto en el que se le puede considerar como una artista y activista de la ecología. Sus mensajes tienen el propósito de preservar el planeta que ella lo ve como un ser vivo.
¿Cómo descubrieron su talento?
Pese a que su producción artística comenzó desde 1920, no fue sino hasta el 2018 que el público comenzó a conocer su trabajo. Todo fue gracias a su participación en la Bienal del Hammer Museum de Los Ángeles, en la que logró mostrar gran parte de su trabajo realizado por la década de los 70.
Los críticos quedaron impactados con su calidad artística y finalmente recibió la atención que merece. Al ser cuestionada sobre si le dio rabia ser reconocida tan tarde, respondió: “Verás, no, no siento ira. Realmente no lo hago. Me siento, ya sabes: ‘Qué estúpido de su parte’. Tal vez la gente que estaba mirando lo que estaba haciendo no tenía ojo para el futuro y, por lo tanto, no tenía ojo para el presente”.
Después de la exposición, fue seleccionada para formar parte de los top 100 más influyentes de la revista TIME por sus aportes artísticos. “Su visión del cuerpo humano como parte del mundo, no separado de la naturaleza, es más urgente hoy que nunca”, explicó el curador de la pieza.
Luchita Hurtado falleció el 14 de agosto del 2020, habiendo conocido el éxito de su trabajo y disfrutando por fin, el reconocimiento que se merece. ¡Gracias Luchita!
