Que, al momento de cerrar los ojos, comience un mundo ficticio todavía más caótico y aterrador que el real, es verdaderamente una pesadilla. Un estudio reciente demostró que es posible controlarlas con algunos procedimientos y aquí sabrás de qué se trata.
¿Qué son las pesadillas?
Nuestro cerebro no descansa en ningún momento y durante todo el día, va captando estímulos -muchas veces inconscientes- que procesa cuando duermes. Muchas de las cosas que ves en sueños, las has visto durante el día.
Por ejemplo: Soñaste que comías un pie de manzana. ¿De dónde lo sacaste? Hoy en la mañana, cuando comprabas tu café, olió a pie de manzana porque un cliente anterior tenía uno. Eso no lo recuerdas conscientemente, pero tu cerebro sí. Las pesadillas son sueños más vívidos y cargados de experiencias sensoriales que te hacen sentir en peligro, pueden ser causadas por miedos, estrés o por simplemente tener un cerebro muy trabajador.
Si bien en los comienzos del psicoanálisis, se pensaba que eran completamente incontrolables, un nuevo estudio demostró que se puede llegar a evitar tener pesadillas utilizando los estímulos necesarios.
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¿Cómo controlar las pesadillas?
Un estudio publicado en Nature Neuroscience y dirigido por la profesora Ursula Voss de la Universidad Goethe en Frankfurt Alemania, determinó que la estimulación transcraneal podría ser la respuesta para eliminar las pesadillas o al menos, disminuir notablemente su carga sensorial.
¿Cómo se hace? Se le introduce al cerebro energía de baja frecuencia en los lóbulos frontal y temporal del cerebro, eso cambia las pesadillas fuertes y vívidas, en sueños lúcidos (que son en los que el cerebro está consciente de que está dormido).
Esto podría ser la solución para las personas que sufren de pesadillas constantes. Este tipo de terapias se aplica a personas cuya calidad de vida se ve afectada por los sueños, no para cualquiera que tenga pesadillas ocasionales.
En otras opciones más homemade, hay una terapia que se llama “desestabilización y exposición”, en el que puedes imaginar la pesadilla vívidamente estando despierto y mientras la vives, practiques ejercicios de relajación como respiración constante, movimiento de músculos y concientización del entorno.
Si bien no hay manera de eliminar por completo las pesadillas, hay muchas terapias que pueden funcionar para aligerar sus efectos. Si tus sueños no te dejan dormir, consulta con un especialista.