Ella era periodista en un canal de televisión, mientras él intentaba descubrir qué significaba ser monarca. Letizia y Felipe se conocieron por casualidad una noche de octubre en el frío Madrid y han pasado 18 años de ese momento y su amor sigue estando en pie. Aquí te contamos los detalles.
¿Cómo se conocieron?
Como por magia del destino, todo ocurrió sin planificación. Juntos fueron invitados a una cena organizada por el periodista español Pedro Erquicia el 17 de octubre del 2002. Era la primera vez que compartían juntos, pero ya sabían uno del otro. Letizia era conocida por su labor periodística y Felipe, por ser Felipe.
Eran los invitados más jóvenes de la noche, por lo que el anfitrión decidió sentarlos juntos. Pasaron toda la velada compartiendo las vicisitudes de la mudanza. Letizia se había mudado a un apartamento de 80 metros cuadrados y Felipe una mansión de 1.800 de más de 4 millones de euros.
Según los testigos, pasaron la noche bromeando y conversando juntos, pero salieron de ahí como dos desconocidos. Felipe ni se atrevió a pedirle el número de teléfono.
Reencuentros sorpresa y rumores en prensa
El destino tenía en sus planes reencontrarlos nuevamente más rápido de lo que imaginaban. Esta vez, en una reunión laboral: los Premios Príncipe de Asturias. Como de costumbre, Felipe saludó a la prensa y ahí estaba Letizia. El encuentro fue casual, sencillo y profesional. No levanto sospechas, pero entre ellos, ya estaba floreciendo el amor.
Todo comenzó a moverse más rápido cuando Letizia viajó a Irak en abril del 2003, a su regreso el príncipe Felipe la contactó y esta vez, no volvería a dejarla ir. Comenzaron a salir en ese momento, pero mantenían su relación lo más privada posible. Se dice que juntos se fueron en un crucero para poder crear un lazo más fuerte sin la mirada de los paparazzis ni las especulaciones de la prensa.
Cuando regresaron, los rumores se vendían como pan caliente y no les quedó otra que hacer oficial su relación. El primero de noviembre del 2003, la Casa Real anunció el compromiso.
Dato curioso: la pedida de matrimonio no fue de princesa, y Felipe no se arrodilló. Todo sucedió en una conversación en su auto. Letizia dijo que sí y han estado juntos desde entonces.
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¿La lluvia es de buena suerte?
Después de que el mundo entero se enterara de el compromiso, era momento de celebrar: el 22 de mayo del 2004 se ofició la boda real española más caótica de la historia. Justo el día que Letizia y Felipe iban a darse el “Si acepto”, llovió tan duro que todos los planes se retrasaron y la logística fue compleja.
Letizia días antes de su boda había caído enferma con una infección en la garganta por lo que no se sentía bien, y tampoco pudo lucir su vestido en la alfombra roja por la lluvia. Este día se le recuerda como uno de los trancones de tráfico más grandes de la historia. Pese a todas las desventajas, se casaron y oficializaron su relación ante 1.200 invitados.
El vestido de Letizia costó solo 6.000 euros (una baratija para ser de un miembro de la realeza) y tenía hilos de plata y oro. Hoy está valorado en más de 55.000 y está expuesto al público en el palacio español.
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Dos princesas que son el fruto de su unión
Aunque la relación de Letizia y Felipe ha tenido cientos de altos y bajos y los rumores de divorcio parecen rondarlos al menos dos veces al año, lo más importante de su relación son sus dos hijas.
La princesa Leonor nació el 31 de octubre del 2005 y su hermana la infanta Sofía nació dos años mas tarde, el 4 de mayo del 2007. La relación sigue en pie y juntos parecen sobrellevar los inconvenientes muy bien. ¡Enhorabuena!