Como parte de la celebración de nuestro 23 aniversario, seleccionamos a Carolina Herrera, diseñadora de modas y empresaria para que sea nuestro talento número 3. Aquí tienes todos los detalles de esta venezolana ejemplar.
No hay duda de que el nombre de Carolina Herrera es sinónimo de moda, pero también de elegancia. Nació en Caracas hace 83 años y desde pequeña vivió de cerca el mundo de la moda (aunque confesó que a esa edad no le interesaba mucho). Su abuela la llevo a su primer desfile cuando tenía 13 años, y era nada más y nada menos que de Balenciaga.
Reinventarse a sí misma
Felizmente casada con Reinaldo Herrera, y con cuatro hijas, a los 40 años Carolina decide reinventarse y se muda a Nueva York donde comienza su ascenso en la moda. “Comencé ya tarde. A los 41 años, pero un deseo que tenía, tuve la oportunidad de hacerlo y no lo dejé pasar. Es importante saber lo que quieres y no dejar pasar el momento preciso cuando llega, no importa qué edad tengas. El tiempo demostró que no era un capricho como muchos creían”, dijo Carolina en entrevista con la Asociación Americana de Personas Retiradas (AARP por sus siglas en inglés).
Su primer desfile lo hizo en 1981. Su éxito fue tal que en 1982 ya vestía a la princesa Isabel de Yugoslovia, Ivana Trump e incluso a la reina Isabel II de Inglaterra, y poro doce años vistió a Jacqueline Kennedy Onassis. Luego en 1986 hizo sus primeras creaciones de novia y en 1988 lanzaba su primer perfume tanto para mujer como para hombre. Su éxito entre la sociedad de Nueva York fue contundente y en el mundo.
Dice que el éxito de su firma se debe a que cuando las mujeres visten de CH se sienten mujeres de verdad. “Yo visto a mujeres, no las disfrazo y la moda tiende muchas veces a ser un disfraz. Por eso siempre digo que el accesorio más importante es un espejo de cuerpo entero, porque tienes que ver cómo te ves, qué te falta y qué te sobra”, comentó para Harpers Bazaar.
“Que lo que lleves, te quede bien a ti”
De opiniones fuertes y a veces hasta controversiales, Carolina dice lo que piensa y es toda una autoridad en cuanto a elegancia y sofisticación. Para ella la moda no debe ser algo pasajero, sino algo individual y original. “Es importante que lo que uses te quede bien, Si no tienes las piernas o la edad para ponerte una minifalda no lo hagas, aunque se lleve, porque vas a verte ridícula”, sentenció.
Es fiel creyente de que las tendencias no deben importar y por ser precisamente pasajeras. “Vivimos un mal momento porque triunfa la vulgaridad. Las mujeres van enseñando todo lo que tienen y dejan muy poco espacio para la imaginación, la fantasía o el misterio. Lo que estamos viviendo hoy en día es un disparate”, remató.
Y así hacia sus colecciones. No se inspiraba en nada, como dijo una vez para la revista Marie Claire. “No me inspiro en ninguna era en concreto. En esta oportunidad he querido hacer una colección marcada por el glamour. Hoy quiero mirar adelante y no al pasado”.
Mirar hacia adelante
Siempre hacia adelante, esa es su máxima, y por esa misma razón dejó en 2018 la dirección creativa de su firma a Wes Gordon, quien tomó las riendas de las colecciones mientras ella se convertía en la embajadora de su marca y seguía a la cabeza de la misma.
Su carrera ha estado llena de reconocimientos, entre los que destacan la Medalla de Oro de las Bellas Artes, la Mejor Diseñadora Hispana y el premio a la Mejor Diseñadora Femenina de la CFDA, que son los Oscars de la moda.
Frases celebres
“Mi prenda infalible es una camisa blanca de algodón”
“Lo más cool para mí es un vaso de agua con hielo”
“Cuando veo a alguien anónimo con un diseño mío me dan ganas de abrazarle”
“El perfume es el complemento invisible que no puede faltar”
“Hay que experimentar con un poco de mal gusto, es como el pimentón en la comida”