Al mejor estilo de “El origen del mundo” de Gustave Courbet, pero a una escala muchísimo mayor, la artista brasileña Juliana Notari creó una exhibición extraordinaria en una montaña en Brasil. Su arte con mirada femenina busca ser una revolución cultural y aquí te contamos de qué se trata.
El origen del mundo
Una vulva gigante se instaló en una montaña brasileña y ha dejado a todos boquiabiertos. Juliana Notari ha revolucionado el mundo con su vulva que pintada de diferentes tonos de rojo, juega con la dualidad de ser vulva y herida al mismo tiempo.
Después 11 meses de trabajo, “Diva” la nueva creación de Juliana Notari se instaló en el municipio de Agua Preta, en Pernambuco, Brasil. Con 33 metros de largo, es hasta el momento, su obra más grande e impactante.
¿Cómo lo hizo? Sorprendentemente, toda la obra fue hecha a mano. “No fue posible usar una excavadora porque no me permitía esculpir con precisión los relieves que necesitaba. Fueron más de 40 manos las que hicieron nacer a “Diva”, más de 20 hombres trabajando en un esfuerzo hercúleo bajo el sol”, explicó la artista.
La enorme excavación tiene a la vez forma de vulva y de herida. Tiene un total de 33 metros de largo, 16 metros de ancho y 6 metros de profundidad. Está hecha con hormigón armado y resina, para que pueda resistir al medio ambiente.
¿De qué se trata la obra? “En “Diva” utilizo el arte para dialogar con preguntas que hacen referencia a la problematización del género desde una perspectiva femenina, combinada con una cosmovisión que cuestiona la relación entre naturaleza y cultura en nuestra sociedad occidental falo céntrica (centrada en el pene) y antropocéntrica (centrada en el ser humano)”, comenta Juliana su obra.
La dualidad de la imagen de vulva y herida, nace como una crítica social a los problemas que, según la artista, están afectando al mundo. “Estos problemas son ahora cada vez más urgentes”, por lo que hacer una exhibición impresionante e inolvidable, era de vital importancia para su proceso creativo.
Te podría interesar: Once Upon a Time in Venezuela, el film de Anabel Rodríguez Ríos que podría traernos un Oscar
La mirada femenina vista desde la herida
En su proceso de descubrimiento como artista, Juliana Notari ha tomado la mirada femenina como inspiración. En una oportunidad, encontró en una tienda de antigüedades 22 espéculos antiguo, -instrumento que se utiliza para los procesos de evaluación ginecológica-, e inspirada en su encuentro, hizo una serie de fotografías dolorosas que muestran cómo se ve una herida.
La visión del espéculo como instrumento que entra en el cuerpo frío y doloroso, para mantenerlo abierto con el propósito de ser tratado, se convirtió en su fuente de inspiración. “El recuerdo de la molestia de ser penetrado por un metal frío, abriendo camino a las miradas especulativas de la ciencia es todo un mundo nuevo”, explica la artista.
Desde entonces, creó estas vulvas/heridas en diferentes museos, pero jamás a la escala que logró en Agua Preta. Todos los espéculos tenían grabados “Dr. Diva”, por lo que así decidió nombrar a su más grande instalación.